VISITA PLANTA DE TRATAMIENTO DE RESIDUOS SÓLIDOS URBANOS DE ALGIMIA (Opinión)
En la visita de hoy a la planta de tratamiento de residuos subyace la intencionalidad de, por suerte una cada vez más gran parte de la población mundial, de concienciación por un mundo más sostenible, por un bienestar ambiental y por ende animal y vegetal, y por un cambio de paradigmas que debería ser global.
Dos sentimientos ambivalentes me han acompañado en esta visita, contrapuestos el uno al otro pero a su vez estrechamente interconectados. Por un lado lo bien estructurado que está todo el proceso de selección de todo tipo de residuos en rigurosos pasos, donde todos los procesos mecánicos y tecnológicos hacen su labor de manera muy bien estructurada y donde también tiene cabida el trabajo manual, no menos importante e imprescindible, para un resultado final de tratamiento de esos residuos óptimo y eficaz.
Sin embargo, por otro lado, me invadía una sensación de tristeza e impotencia al tomar conciencia una vez más, in situ esta vez, de la gran marea de basura que generamos los seres humanos. Miles y miles de kilos de residuos depositados día a día, durante todo el año sin descanso, sin tregua y casi sin control, de manera desmedida. Y es que vivimos en un mundo enlatado, envasado y lo peor, plastificado de manera brutal. Un mundo encorsetado y edulcorado en un consumismo feroz donde todo nos parece necesario y donde todo viene perfectamente envuelto en miles de envases de todo tipo, la mayor parte de las veces innecesarios, que acaban amontonados en contenedores y en el peor de los casos en las calles, los bosques o en el mar.
Pero lo cierto es que tenemos mucha suerte de contar con este tipo de empresas donde los residuos llegan, se seleccionan, se clasifican, se tratan o se desechan porque no quiero ni imaginar una población, un país, un mundo donde no existiera esta función. Lo paradójico de todo esto es que el alivio que supone tener este tipo de plantas de tratamiento de residuos a gran escala es proporcional a la angustia por la ingente cantidad de basura que generamos que llega a todas ellas.
En conclusión, poder visitar este tipo de empresas desde sus entrañas, su funcionamiento y engranajes me ha parecido una muy buena oportunidad no solo de conocer el buen hacer de estas plantas de tratamiento de residuos, sino que consolida mi pensamiento acerca de la importancia del reciclaje, de un consumo moderado y de que un mundo más sostenible es posible.
Helga Fortuny Moreno
25/01/2023
Comentarios
Publicar un comentario